dimarts, 3 de juny del 2008

La Toscana


Una idea, un mapa, 100 euros. Un coche de alquiler. Tres CD's, 5 amigos. Un GPS.

Comernos una tortilla de patatas y unas "papas aliñás" bajo la sombra de la torre de Pisa, darnos un paseo en bici por Lucca, tomarnos unos vasitos de calimocho sobre el rio Arno con vistas al Ponte Vecchio de Firenze. Caffè-latte senza schiuma. Paseo por la Via dell'Amore y demás pueblecitos de Cinqueterre; perder el autobús que nos devuelve al coche y subir ese kilómetro tan cuesta arriba, hasta que aparece un nuevo bus salvador. Bocadillo de pollo con mostaza y moffin de chocolate en una estación de servicio. Cervecita bajo la Santa Croce. Un colchón inchable pinchado que nos ha llenado el cuerpo de picaduras de algo peor que pulgas. Paseo por Firenze: Piazza della Signoria llenísima de turistas, cola en el Duomo, que finalmente no vemos, La Academia dónde el David de Michelangelo nos deja sin palabras. Nos mojamos en la Piazza della Repubblica (hoy, día de la República Italiana). Las puertas cerradas de San Lorenzo y de la Santa Croce. No tenemos tiempo para ver el Museo Uffizi. Cruzamos el Ponte Vecchio, paradita en la puerta (cerrada también) del Palazzo Pitti (hogar de los Medici), fotos a las vistas desde el mirador, más y más escaleras, y vuelta a Roma cantando Lasciatemi cantare, con la chitarra in mano...

Sé que es de esos viajes, improvisados, que hicimos muy bien en hacer.

1 comentari:

mai ha dit...

jajaj todos pasamos este finde por las calles de cinque terre...

a ver si nus vemos a la vuelta!!